Sin darme
cuenta, y con la ilusión de un niño por conocer a uno de sus ídolos, me
encontraba en la puerta del hotel Enara, junto a Nacho Tomé y José Bermejo,
(grandes triatletas vallisoletanos), esperando a todo un campeón del mundo,
Eneko Llanos.
Nacho Tomé, César Mato, Eneko LLanos y José Bermejo |
La empresa no
era otra que acompañar al campeón y mostrarle el recorrido del ICAN Triatlón
que este sábado se disputa en nuestra ciudad.
Eneko Llanos muestra una actitud súper simpática y agradable desde el
primer momento, rodamos con él y hablamos compartiendo opiniones como si fuera
uno más de la grupeta de toda la vida. Una de las cosas que
más me sorprendió fue la humildad, la simpatía y el saber estar. ¡Es un grande
dentro y fuera de las carreras!
Rodando los cuatro |
Recorrimos los
90 km
del circuito de bici a un ritmo medio, con algunas series de 10 minutos a un
ritmo elevado, tan elevado como que íbamos a 50km/h. Pensé que explotaba pero
la ilusión y la emoción de estar con él provocaba que la bici fuera sola. No
asimilaba muy bien que iba a rueda de aquel que veo en las portadas de la
revistas y sobre del que tanto he leído.
Con Eneko, en Tordesillas |
Finalizamos el
recorrido, parece que le ha gustado bastante, eso me satisface como
vallisoletano, además he podido charlar con él y recibir buenos consejos, que
más se puede pedir. Le acompañamos al hotel y nos citamos después de comer para
ir nadar al río, y tenga también un conocimiento previo del circuito de
natación. Y así fue, después de descansar un rato y reponer fuerzas nos
dirigimos al Pisuerga, allí nos esperan muchos compañeros del Tripi y el
Molpesa, nadamos todos juntos y pasamos un rato agradable.
Mas tarde,
Bermejo y yo llevamos a Eneko al hotel, es hora de descansar, nos despedimos y
le deseo toda la suerte para el sábado, pero sobre todo para el Cpto del Mundo
en Vitoria.
Dos craks Bermejo y Eneko |
Pensando y
pensando, me he dado cuenta de que he pasado uno de los mejores días
deportivamente hablando. He podido compartir kilómetros a rueda de uno de los más grandes y alguna que otra brazada,
pero eso es casi lo de menos. Lo que verdaderamente he aprendido, es que
para ser un verdadero campeón hay que ser primero una gran persona, humilde,
amable y educada por encima de todo.
GRACIAS
POR ESTE DIA.
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