Después de
causar baja de última hora en Palencia por un virus inoportuno tenia ganas de saber mi verdadero estado de forma
actual. Me presente en Valbuena junto a la mayoría de mis compañeros de equipo
buscando un último test de cara a la liga de clubs.
Una natación a
priori corta presagiaba una salida en el agua muy rápida. Lo sabía pero aun así
me entran las dudas y los agobios que desde Almazán me acompañan en cada salida,
y me hacen salir de menos a mas perdiendo la opción de ir con el primer grupo. Se van por delante unos cinco nadadores,
entre ellos mis compañeros Oscar, Mario y Manso, con los que entreno a diario. Los entrenamientos junto a ellos me hacen
ver que puedo estar ahí o muy cerca, pero la competición no solo es nadar, sino
saber situarse, luchar la posición y olvidar los “miedos”. Hasta que no sea capaz de eso lo demás no
importa. De poco vale entrenar duro y bien si luego no eres capaz de plasmarlo
el día de la carrera.
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| Primeros metros |
Finalmente
salgo en el segundo grupo, una larga transición y por delante un recorrido de
bicicleta duro con dos largas subidas. En seguida se forma un grupillo de 8 o 9
triatletas, al inicio de la subida alcanzamos a Oscar de Nicolás y nos dice
como va la cosa, tan solo cuatro van por delante, entre ellos Mario y Manso.
Son mis compañeros y juego con esa ventaja,
claramente digo que yo no voy a entrar al relevo para darlos caza, así
que Alfonso Martínez (Tri Zamora) y Bujan
(Aguaverde) se encargan de llevar el peso del grupo. En la subida solo ellos
colaboran, el resto parece que va con lo justo para no cortarse. En el punto de giro la diferencia con el
primero ronda el minuto, Manso y Mario van más atrás. Yo me sigo manteniendo al margen. Al inicio de la segunda vuelta el grupo se va
reduciendo, y Alfonso junto con otro triatleta aragonés marcan la primera parte
de la subida alcanzando a Mario, decido
que es el momento de colaborar y marco el ritmo dando un puntito para reducir
el grupo lo máximo posible. Al final nos quedamos tan solo cuatro, y por
delante solo Ariel Hernández (Aguaverde) y Manso. Así afrontamos la bajada a la
transición, Mario se corta en esta y Alfonso y yo llegamos a la T2 con ligera
ventaja.
Contento con
el sector de bici, era duro y me encontré bien. A pesar de ir la mayor parte
vigilando y sin entrar al relevo había que estar ahí en un circuito que se resumía en un larga subida y una larga
bajada, además íbamos “encunetados” hecho que lo dificultaba aun mas.
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| Podium por equipos |
Continuando
con la carrera salgo con Alfonso de la T2, vamos 3º y 4º, pero su ritmo es
superior y solo puedo seguirlo con la mirada. De piernas no voy mal pero llevo
amagos de flato, asi que reduzco el ritmo, me alcanza mi compañero Mario y se
va unos metros, pero creo que corriendo a pie no era su día al igual que el
mío tampoco. Es un circuito entretenido, por un caminito lleno de sube y
bajas. En la segunda vuelta Mario y yo vamos
a la par, la verdad que desconectamos del todo yendo a un ritmo cómodo, nos
pasaron varios triatletas más. Al final entramos en meta de la mano, eso si previo calenton en
los últimos metros ya que por detrás venia el mister con el garrote… jajaja.
Cruzamos la
meta 8º y 9º, con sensación agridulce, al menos ayudamos al equipo a lograr la
victoria. Personalmente tan solo salgo satisfecho con mi rendimiento en
bicicleta, en la natación sigo sin hacer las cosas bien, y corriendo, bueno
corriendo no puedo pedir mucho mas este año, habiendo hecho mis rodajes mas
largos en competición. Espero que la próxima semana en Santander las
sensaciones mejoren, y pueda rendir a buen nivel hasta el final.
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