martes, 12 de febrero de 2013

Otra traba en el camino, pero aqui estamos para superala



Tenía pensado hacer una entrada antes de viajar a Lanzarote, donde os contaría lo contento que estoy por poder ir allí unos días a entrenar con buena temperatura, buen ambiente y gran compañía. Todo esto a decir verdad sigue en pie, y por supuesto que lo hare. 

Pero a veces en la vida suceden cosas inesperadas, y que cambian, aunque espero que por muy poco tiempo los hábitos o mejor dicho las buenas costumbres que uno tiene. Dudaba si hacerlo público o no, ya que es un tema muy  íntimo, pero como siempre he dicho este blog es un blog deportivo, donde cuento mis alegrías y mis penas  (deportivamente hablando). El caso es que esto que voy a contar está estrechamente relacionado, y de una forma u otra me sirve de desahogo, además pienso que me hace más humano.

Pues bien, hoy martes 12 de febrero, tenía el rutinario reconocimiento médico, con su correspondiente prueba de esfuerzo (la primera en mi caso). Todo iba bajo lo previsto, analíticas, esperiometria, todo normal. Cuando llega la hora de la prueba de esfuerzo me calzo las deportivas y a correr. La prueba sale muy bien, hasta mejor de lo esperado. Según el médico que lo controla estoy como un “toro” y tengo un corazón grande y potente, pero cuando paro en seco me da un pequeño mareo y mis pulsaciones bajan rápidamente, cosa que no es normal y ahí vienen las preocupaciones. Me realizan más pruebas y paso a consulta de la especialista, me cuenta cosas que hacen que se me venga el mundo encima, son todo supuestos, y según van llegando mas resultados parece que todo puede ser un caso aislado debido a una lipotimia, golpe de calor, o bajón de azúcar (ya que la prueba era en ayunas porque también me sacaron sangre y no hubo tiempo entremedias de comer). 

La cosa es que por prescripción médica no debo entrenar por encima del 75% de mis pulsaciones hasta la realización de diferentes pruebas que descarten cualquier tipo de patología. La verdad es que he pasado una de las mañanas más duras de mi vida, cuando oí la posibilidad de dejar el deporte de competición se me caían las lágrimas. Ahora mismo estoy más tranquilo, y debo agradecer el buen trato allí recibido. Solo queda esperar a las diferentes pruebas, y ojala y estoy seguro que todo esto quede en un feo recuerdo, fruto de un hecho aislado.

Todo esto no lo cuento para dar lastima ni mucho menos, quizás es un tema sensible que no debiera contar, pero como dije antes es mi blog, donde expongo mi vida deportiva, mis sensaciones, sentimientos, resultados etc., y por desgracia en esta vida hay cosas malas y buenas, y ahora mismo estas palabras me han servido de vía de escape por decirlo de alguna manera.

Además de todo lo malo, se saca algo bueno, y es saber valorar lo que tenemos, y los afortunados que somos por hacer lo que nos gusta sea lo que sea, y por ello valorarlo como tal.   En mi caso es el deporte, sin él no sería yo.  Estoy seguro que después de este mal trago y cuando todo se aclare seré aún más fuerte, y disfrutare el doble de la competición sea cual sea el resultado final. Recuerdo que el gran Gómez Noya  también tuvo algún sustillo con su corazón y miren ahora…..

Ahora me esperan unos días un poco incomodos, pero que intentare pasarlo lo más tranquilo posible, después marchare a Lanzarote, donde mi “planning” cambia completamente, ya que lo que iba a ser un “machaque” de horas y horas, ahora serán salidas agradables disfrutando de mi deporte favorito, y de la buena compañía. Un abrazo a tod@s y a disfrutar de la vida!

3 comentarios:

  1. Ánimo campeón!!Todo será un susto,ya veras.
    Tu vecina ;)
    Noe.

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  2. mucho animo,y mira lo positivo,seguro que ha sido un susto y que te hara disfrutar ms de tus entrenos en Lanzarote,un besazo muy fuerte
    Mar

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  3. no le des muchas vueltas, seguro que todo se queda en un susto, por aquello de más vale prevenir.., sigue adelante

    Rosa.

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