Me habían
hablado muy bien de la primera edición del triatlón Ciudad de Zamora, así que
esta segunda no podía perdérmelo… y no decepciono en absoluto, estoy seguro que
cada año ira a más convirtiéndose en un triatlón de referencia en Castilla y
León. Prueba de ello, es que a los dos días de abrirse las inscripciones ya
estaban cerradas las 150 plazas disponibles, existiendo un muy buen nivel entre
los participantes.
Con las miras
puestas este fin de semana en el Cpto. de España de Pontevedra esta prueba nos
venia de lujo para saber cual es nuestro estado de forma actual y coger ritmo
de competición que falta hace.
Una natación
poco usual; dos vueltas en las que se salía del agua y se corría por la orilla
para volver a zambullirse. De salida nos lanzamos a tope, hay que llegar a la
primera boya bien situados; esta cerca y a contracorriente. La cosa marcha, pero
cuando nos aproximamos a esta se forma un embudo increíble, la corriente es
fuerte y la situación se complica. Muchísimos golpes y apenas se avanza, hay
un paron literal y el paso de boya se
convierte en una hazaña. A partir de aquí pierdo la referencia de mi posición
en carrera, me dedico apartarme del tumulto y prefiero nadar a mi ritmo sin
buscar otros pies; demasiados agobios. Poco a poco cojo ritmo y mis sensaciones
son buenas, comienzo a pasar nadadores y salgo en la primera vuelta entre la
12-15 posición; echo un vistazo y veo un grupito cerca, ese es mi
objetivo. Voy recortando y finalmente
salgo del agua el octavo, siendo consciente de que mi mayor problema en el agua
siguen siendo las salidas, donde estoy seguro que es mas psicológico que
físico.
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| Paso por vuelta |
Una buena
transición y salgo sexto de boxes, sabedor de que mi entrenador y compañero
de equipo Rubén Hernando
(que esta mas
fuerte que el vinagre), ha salido conmigo del agua, así que me calzo las
zapatillas, miro atrás y hacemos un buen dúo, en seguida damos caza Alberto de
la Cruz y Guillermo Sánchez, y antes de finalizar la primera vuelta hacemos lo
propio con Herraez del CTOA. Por delante quedan otros
tres giros, y solo relevamos Rubén y yo, el
resto están enganchados como vagones de tren. Somos conscientes de ello, pero
no podemos parar, por detrás vienen fuertes y por delante nuestro compañero
Oscar de Nicolás y Kevin Viñuela van a tope y con margen.
En la última vuelta es hora de mover el árbol,
Rubén me dice que en uno de los puentes que entra viento lateral me pegue a su
rueda, aumenta el ritmo, todos sufrimos y Guillermo se descuelga, pero de la
Cruz y Herraez siguen ahí. Ahora es mi turno, y de nuevo en el otro puente, le
digo a Rubén que atento, pego un palo que hace daño, y poco a poco nos
marchamos los dos, dejándoles descolgados. Hicimos un buen trabajo en equipo. De
aquí a la transición intentamos abrir mas hueco y sobretodo mantener la distancia
con el grupo perseguidor en el que vienen grandes corredores a pie.
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| Podium por equipos |
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| Entrada a meta |
La
segunda transición
la hago un poquito
peor, sin querer doy con mi bici a la de Rubén y se engancha, pero finalmente
consigo colocarla aunque salgo con algunos metros perdidos. Me encuentro bien,
y recorto esa distancia, me pego a su espalda, el ritmo es muy bueno, pero no
podemos relajarnos.
Tengo claro que con
aguantar ahí tengo mas que bastante, por megafonía van cantando nombres y se
que Alfonso Martínez del Tri Zamora, y Ricardo Alcalde del IMD Segovia, no
están lejos y corren mucho. Un circuito rápido de carrera a pie y muy bonito a
los pies de la capital Zamorana, que consta de dos vueltas. La primera de ellas
voy junto a Rubén, pero al comenzar la segunda en una subidita empiezo a sufrir
y tengo mi momento de crisis, por suerte me repuse pronto y consigo mantener el
ritmo y no perder la referencia de Rubén que va a escasos metros. Por detrás se
aproximan y van apretando mucho, los últimos kilómetros es un sprint continuo,
pero logramos salvar la cuarta posición, que sinceramente a día de hoy había
firmado con creces muchos antes de empezar.
Por delante Kevin Viñuela del IMD Segovia se hizo con la victoria,
seguido de mi compañero Oscar de Nicolás,
y Rubén Hernando tercero realizando todos ellos un carreron. Además nos
hicimos con la victoria por equipos, las cosas empiezan a salir y el equipo se
va reponiendo de un año lleno de infortunios a nivel general. Personalmente, cada dia mi forma es mejor aunque mucho trabajo por delante aun.
Felicitar
a la organización, un triatlón fantástico y con gran ambiente, donde el
publico fue numeroso y no dejo de animar.
Me habían
hablado muy bien de la primera edición del triatlón Ciudad de Zamora, así que
esta segunda no podía perdérmelo… y no decepciono en absoluto, estoy seguro que
cada año ira a más convirtiéndose en un triatlón de referencia en Castilla y
León. Prueba de ello, es que a los dos días de abrirse las inscripciones ya
estaban cerradas las 150 plazas disponibles, existiendo un muy buen nivel entre
los participantes.
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